Ciudad de México a 20 de junio de 2025.- La suboficial piloto aviador Hasel Aguilar, es una de las únicas dos mujeres de la Guardia Nacional (GN) que surca los cielos mexicanos y sueña con volar la flota de helicópteros de esa institución.
Perfectamente equipada con su traje negro de nomex, casco en mano y frente a una aeronave de ala rotativa MI-17, la joven originaria de Puebla que ya pilotea aeronaves de ala fija y semi fija como el Cessna, el Grob 120-TP y el Pilatus PC-7, no se conforma con ello y ahora tiene como una de sus principales metas volar los helicópteros que la Guardia Nacional utiliza para sus operaciones de seguridad pública.
“Mi meta es ser comandante, ya sea de aeronaves de ala fija o de ala rotativa, claro que me gustaría volar una de las 24 aeronaves de ala rotativa, para eso me gustaría especializarme, tomar cursos en el extranjero e ir escalando en mi jerarquía”, externó la suboficial quien también espera, “en algún momento no muy lejano”, poder trasladar vía aérea a la presidenta Claudia Sheinbaum y, con suerte, tener la oportunidad de expresarle “la admiración y la inspiración” que la titular del Ejecutivo provoca en ella.
A sus 23 años y con 240 horas de vuelo en su bitácora, la graduada en 2020 del Colegio del Aire de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa), en Zapopan, Jalisco, es parte de la primera generación de pilotos aviadores de la GN (11 varones y 2 mujeres oficiales), y con ello cumplió un sueño que desde muy pequeña tenía.
“Es un sueño en común que tenía con mi hermana, Naomi, quisimos ser pilotos desde los 16 años, ella no pudo entrar al Colegio del Aire por un problema médico, ahora me levanto todas las mañanas pensando en que estoy cumpliendo nuestro sueño, pues ¿A quién no le gustaría volar por los cielos y ver los problemas chiquitos?, es algo que no cualquiera puede realizar”, dijo la originaria de Huauchinango, Puebla, que atesora volar de noche y operar el Cessna porque es como su “primer amor”.
En las instalaciones de la Dirección General de Operaciones Aéreas, de la Guardia Nacional, ubicada en la Base Contel, alcaldía Iztapalapa, la también licenciada en Seguridad Pública, Hasel Aguilar, quien considera que volar “no es un trabajo, sino una pasión”, narró que está contenta de poder ayudar a la ciudadanía y confesó que, así como la Comandante Suprema de las Fuerzas Armadas, Claudia Sheinbaum, la inspiró, ella espera que su historía aliente a las niñas a luchar por sus sueños.
“Sueño con inspirar a mujeres, inspirar a alguna niña que diga que ella quiere ser piloto y que quiera demostrarse así misma que las mujeres estamos llenas de pasión y que también podemos proteger a la población”, agregó la suboficial perteneciente a la Dirección General de Transportes Aéreos de la Guardia Nacional que 2025 cumplió 6 años desde su creación y cuyas aeronaves ejecutan varias funciones, principalmente: tareas de seguridad pública, como patrullajes de disuasión y prevención de delitos; transporte de personal; evacuación médica, combate de incendios forestales y apoyo a operaciones de protección civil, vigilancia y búsqueda y rescate.