Considerada la undécima musa de la poesía en México, Pita Amor luchó contra los prejuicios de la época hasta que la tragedia la alcanzó.
Ciudad de México a 19 de Mayo de 2025.- Nacida en una familia conservadora porfirista, Guadalupe Teresa Amor o mejor conocida como Pita Amor, desafió su destino noble para mostrar al mundo su belleza atrevida, la rebeldía de su alma y sus versos que la llevarían convertirse en una de precursoras de la liberación de la mujer durante los años 50’s.
Pita Amor es considerada una de las poetas mexicanas más prestigiosa del siglo XX, al mismo nivel que la Décima musa, sor Juana Inés de la Cruz, no obstante, su forma excéntrica de vestir, su hijo fuera del matrimonio y el deseo absoluto de libertad que caracterizarían sus obras le bastaron para sumar más detractores que admiradores a su trabajo.
Guadalupe Teresa Amor Schemidtlein nació el 30 de mayo de 1918, desde muy temprana edad mostró su rechazo a las normas sociales que dictaminaban el actuar de las mujeres de esa época, por lo que sus padres no tuvieron la fuerza para controlar la rebeldía de Pita y la dejaron ser libre.
Antes de incursionar en la escritura, Pita se desempeñó como actriz de cine y teatro. Su belleza cautivó a fotógrafos y pintores destacados de la época como; Diego Rivera, Juan Soriano y Raúl Anguiano, que inmortalizaron sus finos rasgos llenos de arrogancia.
Cuando cumplió los 27 años, Pita tuvo su primer encuentro como escritora mismo que años más adelante narraría en su poema “Confidencias de la autora”, donde describe como una revelación extraordinaria y casi milagrosa.
“Una noche, no sé cómo, ya no puedo recordar por qué, movida por un impulso superior, yo que no tenía cultura ni noción de lo que era la poesía, tomé un lápiz, el único a la mano: el que me servía para pintarme las cejas. Y en un pedazo de papel, empecé a escribir mis renglones”: Pita Amor.
Desde la publicación de su primer libro “Yo soy mi casa” la vida y obra de Guadalupe Amor seguirían en ascenso, demostrando que a pesar de las críticas ella era capaz de ser grande dentro del mundo literario como los hombres lo eran.
En un fragmento de su obra “Yo soy mi casa”, Pita Amor escribió su fantasía de asesinar a su prima Paulette debido a que le tenía envida por casarse con el príncipe polaco Jean Poniatowska. La vida amorosa de Pita no fue del todo tradicional ya que se le conocieron varios romances, algunos con hombres mayores, que no fueron bien vistos por la sociedad.
De ese matrimonio nació la periodista Elena Poniatowska, misma que en su libro de relatos “Las siete cabritas” escribió el día que Pita Amor le dijo:
“¡No te compares con tu tía de fuego! ¡No te atrevas a parecerte junto a mí, junto a mis vientos huracanados, mis tempestades, mis ríos de lava! ¡Yo soy el sol, muchachita, apenas te aproximes te carbonizarán mis rayos! ¡Soy un volcán!”. Anécdota de Elena Poniatowska
La periodista cuenta que su tía le prohibió usar su apellido materno, por lo que Elena tuvo que tomar el apellido de su padre para comenzar a ser una figura pública.
El declive de Pita Amor marcado por la tragedia
Y aunque pareciera que la vida de Pita se desenvolvía a sus placeres, una tragedia marcó su historia dejándola en una gran depresión, la muerte de su hijo Manuelito. Con tan solo un año y siete meses, Manuelito murió ahogado en una pileta de agua mientras se encontraba bajo la tutela de la hermana de Guadalupe Amor.
Tras esta pérdida, el declive de la poeta fue inminente, tanto que mantuvo un periodo de silencio durante cinco años, dejando que su presencia y letras quedarán solo para aquellos que pudieran recordarla.
En una de sus últimas grabaciones realizadas en 1990, Pita declamó su poema “Letanía de mis defectos” donde plasmó su belleza física y la rebeldía que la caracterizó durante sus años públicos.