El pequeño fue sometido a cirugías en la cadera y piernas, derivadas del impacto que tuvo por la unidad.
Hermosillo, Sonora a 29 de enero de 2025.- Después de haber sido embestido por una unidad del transporte urbano en el Centro de Hermosillo el pasado lunes, el menor de dos años fue intervenido quirúrgicamente para corregir las lesiones que presentó en varias partes de su cuerpo, quien en las próximas horas saldrá de cuidados intensivos y pasará a piso en el nosocomio que es atendido.
La Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) informó a través de un comunicado, que el pequeño fue sometido a cirugías en la cadera y piernas, derivadas del impacto que tuvo por la unidad, a cuyo chofer se le otorgó la libertad por parte del Ministerio Público.
En el reporte se establece que el niño se encuentra consciente y se le dará el seguimiento médico correspondiente hasta que presente una recuperación total de su cuerpo, mientras que a los familiares se les brinda asistencia psicológica por medio del Centro de Atención a Víctimas del Delito.
Una vez que se agotaron las diligencias relacionadas con el suceso, donde se echó mano de testimoniales, análisis de los videos recabados, así como los dictámenes periciales conducentes, se determinó que el menor corrió intempestivamente y de forma directa a la vialidad hasta tener contacto con el vehículo de transporte público.
Así mismo, se informó que el chofer se encontraba en estado conveniente, no circulaba a exceso de velocidad y cumplía con los estándares para desempeñar cabalmente esa función.
Por lo tanto se le otorgó la libertad con las reservas de la ley, sin que se precise si será requerido en futuras diligencias o queda exento de este tipo de procedimientos.
Dentro de las líneas que arrojaron las indagatorias, se determinó que, aún y cuando hubiera ido a una velocidad menor, el chofer, al tener un espacio visual restringido por salir el menor de entre vehículos estacionados, no pudo haberlo visto para evitar el contacto.
De igual forma, se hace mención que la distancia a la que se encontraba el vehículo al momento en que el peatón ingresó al carril de circulación es apenas de 4.83 metros, muy inferior a la distancia necesaria de 40.38 metros para detener el vehículo y evitar el atropellamiento, asumiendo que no hay espacio hacia la izquierda para una maniobra evasiva.